Como he hecho otras veces, hoy tengo que reconocer que me encantan las películas asiáticas y entre otros temas, las de Artes Marciales.
Estaba viendo , Rurouni Kenshin, El guerrero Samurái, donde cuentan la historia de Kenshin, un samurái despiadado y asesino que años después se redime y decide no volver a matar.
Me encantó la trilogía y me llamó especialmente la atención una de las escenas:
Estaba Kenshing entrando en un pueblo cuando vio colgados dos cuerpos de un árbol, debajo había un niño mirando, eran sus padres asesinados. Al cabo de un tiempo Kenshin volvió al pueblo, y se encontró a los asesinos atados en la plaza y a las gentes del pueblo hostigando al niño para que los matara. El niño había entrado en un frenesí y con un cuchillo en la mano, se disponía a hacerlo, cuando Kenshin, lo paró y le dijo: ” si haces esto te vas a convertir en un asesino, y entonces no vas a ser mejor que estos que ahora vas a matar. Yo he hecho esto y he pagado un alto precio, por eso ahora te digo que no lo hagas”
EL niño escuchó a Kenshin, lo miró y soltó el cuchillo.
Cuando Kenshin paró su mano, el niño por primera vez pudo empezar a sentir el dolor, pudo empezar a sentir el resto de emociones escondidas y protegidas por el odio y la rabia..emociones … como dolor, miedo, desolación… y empezó a llorar, y lloró desesperadamente, desconsoladamente, empezaba a sentir.
Esta es para mi una de las lecciones más duras del camino del guerrero, dejar de actuar nuestros patrones de acción- reacción y empezar a sentir lo que estamos protegiendo con ellos.
Esta escena tocó una parte muy profunda de mi adentro y empecé a reflexionar… cuantas veces yo entro en un patrón de acción-reacción… tú me haces, yo te hago… entrando en una espiral de lucha de la que es después muy difícil salir, sin permitirme sentir cuantas emociones hay debajo… dolor, vergüenza, traición, impotencia, etc.
Personalmente he necesitado muchos años de preparación para empezar a mirar mis zonas oscuras, para empezar a estudiar mis patrones de acción-reacción sin siquiera cambiarlos, solo mirándolos. Empezar a hacer consciente mis partes inconscientes.
Y así poco a poco me he permitido ir quitando capas de cebolla, de protección para poco a poco empezar a sentir que hay en las capas más profundas….por ejemplo el dolor que hay en mi corazón y otras emociones guardadas durante años… tomando responsabilidad y estudiando como yo he provocado determinadas situaciones con mis palabras, mi posición corporal, mis acciones…etc.
Esto es para mi Una guerrera (O Un guerrero) , una persona que se atreve a mirarse a ella misma, se atreve a mirar sus zonas claras y oscuras y empieza a permitirse sentir con otra profundidad.
Este es gran parte del trabajo personal que durante años yo y los otros estudiantes de Thomas Hertlein hemos empezado a hacer: Entrar en nuestra Matrix y empezar a conocerla.
Pero qué es MATRIX?
Vamos a descubrirlo en las próximas entradas!
Hasta pronto Guerreros!
