Hoy os escribo desde el Nassau beach.
Estoy sentada delante de una gran ventanal, hoy salpicado con gotas de agua de mar, desde alli veo la playa, el mar y al fondo un gran horizonte sin límites de tierra… solo mar y cielo…ESPACIO.
Ver el mar siempre me calma, es mi zona de meditación donde puedo apaciguar mis dudas e inquietudes y entablar un diálogo interno con mi zona de seguridad, cerca del mar me siento segura.
Hoy hace mucho viento. Se oye como un silbido al pasar entre los cristales que a su vez vibran con mucha intensidad.
Siento que he vuelto a mi valle de tristeza y melancolía. Me siento bien en él, ya es una parte de mi misma que puedo disfrutar.
Hoy me he despertado pensando qué pasa cuando por fin conseguimos lo que conscientemente hemos deseado y querido durante años….AÑOS…
Ahora me siento así.
Y en mi caso me doy cuenta de que me quedo paralizada.
Antes tenía una meta, un objetivo al que llegar… y una y otra vez tomaba el mismo camino para llegar allí, un camino que iba aprendiendo y estudiando… no me gustaba el camino, pero lo he recorrido tantas veces que ya me daba mucha seguridad, era como sentirse en casa. Lo conozco muy bien.
Pero qué pasa cuando ya hemos llegado a nuestra meta y hemos estudiado tan bien el camino que nos hemos ganado no volver por él: Ahora Luisa, ya eres libre para construir tu nuevo camino.
La primera sensación es de Pánico…UPS!
Me siento como si estuviera delante de un campo de trigo con la posibilidad de empezar un camino nuevo…
Aparecen nuevas inquietudes e inseguridades:
Por donde empezar?
Que elegir?
No termino de creer que ahora puedo empezar el camino que tanto he deseado…. Es real? es verdad?
Cuanta responsabilidad!
Me siento paralizada. EN otras ocasiones me he sentido así y sin darme cuenta he vuelto al camino conocido porque lo conozco, y se como comportarme y reaccionar en él.
Por eso, y aunque parezca raro, en ocasiones vuelvo una y otra vez a lo conocido…
Pero esta vez quiero hacerlo diferente.
Para poneros un ejemplo… durante este camino de crecimiento personal mi coach me ha acompañado a mis zonas más oscuras, me ha ayudado a confrontarme con mis peores miedos, me ha ayudado a hacer las paces con mis autoridades internas y externas (algo que parecía imposible) al igual que a cambiar mi rol de mami y hacerlo mucho más amoroso.
Siento que he cumplido mis metas y mis objetivos.
Y ahora qué?
En este camino mi vida tenía un sentido. Mis relaciones tenían un sentido, buscaba hacer las paces, encontrar mi paz interior y crecer en algunos aspectos de mi vida que vivía de una forma infantil, es decir: quería sentirme una mujer adulta.
Y ahora … QUÉ?
Cual es el sentido de mi vida a partir de ahora?
Hasta pronto!